martes, 27 de mayo de 2008

Ninfas de Judea

Galilea Galilei
Una amiga me escribe y me cuenta que acaba de regresar de una boda en Galilea, donde la novia lucía a la espalda el sol del Mediterráneo, como una ninfa de Judea cantada por Salomón. Me dice también mi amiga que en medio de esa magia cabalística irrumpió de pronto Nacha Pop (sí, sí: Antonio Vega y compañía), deleitando a la audiencia con esas canciones que nos atan para siempre a un pasado que, tal vez, nunca quisimos dejar atrás. Mi amiga bailó la Chica de Ayer al son de las olas rompiendo contra el mar. Y yo, en otro mar, me pregunto por qué Enrique Urquijo no podrá ya nunca tocar sobre un vidrio mojado en la bahía de Manila.

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/05/27/cultura/1211842233.html

2 comentarios:

Ezequiel dijo...

Sorprende que el bueno de Antonio aguantase el viaje. Yo le vi hace poco en la gira de Nacha Pop por España antes de Navidad y se le ve muy afectado. Ahora que el que daba pena de verdad era su primo Nacho que intentaba capitalizar el protagonismo con grititos y pseudosaltos cuando lo que la gente habia ido de verdad a ver era a Antonio.

Anónimo dijo...

Tienes mas razon que un santo. Nacho fue siempre un hortera bolera. Por cierto, que curioso la cantidad de lazos familiares en las bandas que tocaban en la epoca de la movida: Nacha Pop (los primos Vega), Secretos (los hermanos Urquijo), Mecano (los hermanos Cano)...y ahora lo mismo (ej. Amaral). la cosa familiar en Espana lo marca todo.